Pensar

Fue el deseo expreso de Rodin que su «Pensador» fuera su epitafio y lápida. Poco antes de morir, comentó sobre el sentido de la obra:

La naturaleza me da mi modelo, la vida y el pensamiento; las fosas nasales respiran, el corazón late, los pulmones inspiran, el ser piensa y siente, tiene dolores y alegrías, ambiciones, pasiones y emociones. Éstos debo expresar. Lo que hace a mi Pensador pensar es que piensa no sólo con su cerebro, con su ceño fruncido, con sus fosas nasales distendidas y los labios apretados, sino también con cada músculo de sus brazos, su espalda y sus piernas, con su puño cerrado y sus dedos del pie encogidos.

Magistral. El maestro encontró las palabras que quizás ninguno de los que le queremos hubiéramos sido capaz de hilvanar.

El hallazgo se lo debo a Ame. Gracias. 😉